Gracias a la tecnología y a sus avances, actualmente podemos imprimir de muchas formas y encontramos todo tipo de etiquetas a nuestra disposición para poder cumplir con las exigencias que nos piden algunos sectores. En este artículo queremos prestarle especial atención a las etiquetas térmicas cuya impresión se realiza por calor.
Son muchos los sectores y muy variables los que demandan este tipo de etiquetas para cada caso, aunque las más frecuentes suelen ser las industrias alimentarias, de congelados o de libros, entre otros. Se fabrican sobre un papel que cambia de color según la temperatura, sobre todo si llega a altos niveles. Así pues, la superficie se pone negra cuando pasa por el cabezal, generando la impresión que desea. Así pues, según el uso que se le dé a la etiqueta, se elegirá un acabado u otro. ¿Sabes cuáles son? Tenemos a nuestra disposición dos tipos de etiquetas, las térmicas directas o las de transferencia o también llamadas T.T.
Tipos de etiquetas térmicas o también llamadas T.D.
- Podemos disfrutar de un elegante acabado en mate, donde la superficie es directamente el sustrato térmico que no obtendrá ninguna protección añadida. Este diseño es ideal para aquellos productos que tienen una corta vida útil, para los productos que no están expuestos al sol, a la humedad o al calor.
- ¿Quieres un diseño más original? En Etiquetas Rápidas podrás disfrutar de etiquetas térmicas con un acabado brillante, un diseño cuya fabricación consiste en añadir una capa de protección sobre el sustrato térmico, permitiendo el etiquetado de productos con mayor resistencia a los roces y al desgaste. No obstante, deben estar ubicados en sitios alejados a los rayos del sol y a la humedad.
- En este tipo de productos podrás disfrutar de las etiquetas de papel couché con un acabado brillo. A este diseño se le añade unos materiales que permiten ser altamente tolerantes a la humedad e ideales para productos que deben refrigerarse o deben ubicarse en exteriores.
Tipo de etiquetas de transferencia térmica
Esta variedad de etiquetas térmicas permite muchos materiales, debido a que la cinta de transferencia se adhiere a la etiqueta formando la impresión. Son un modelo que se destina, generalmente, a usos más exigentes porque soportan al calor, al frío, humedades y roces. Las etiquetas más comunes son:
- De papel couché acabado en mate. Etiquetas simples y económicas, sin protección que soporta a la perfección los rayos de sol y las fuentes de calor, aportando una larga vida útil.
- De papel couché acabado en brillo. Añadiendo una capa protectora sobre la superficie que le aporta una gran resistencia a la humedad y es ideal para productos que serán refrigerados o que se ubicarán en el exterior y deberán sufrir enormes cambios de temperatura.
- Poliéster, de una gran calidad de impresión y ofrece una mayor durabilidad. ¿Necesitas un material que resista a la intemperie, al agua, al calor y al sol directo? ¡Este es tu modelo ideal!
Visita nuestra web donde encontrarás el formulario de contacto y podrás contarnos qué requerimientos tienes. Si lo deseas, también nos puedes llamar al +34 93 241 80 80 o enviarnos un email a er@etiquetasrapidas.com. ¡Prueba nuestras etiquetas térmicas de calidad!
¿Qué empresas utilizan las etiquetas térmicas?
Muchas empresas se decantan por usar etiquetas térmicas para sus productos. Entre las más habituales se encuentran las industrias alimentarias y de congelados.
¿Qué diferencias hay entre las etiquetas térmicas directas y las etiquetas de transferencia?
Las etiquetas térmicas directas se imprimen sin necesidad de ribbon, la cinta que adhiere la información a imprimir, mientras que las etiquetas de transferencia sí la utilizan. Estas últimas aguantan mejor el calor y el frío, la humedad y los roces.
¿Qué tipos de etiquetas de transferencia térmica existen?
Las etiquetas de transferencia térmica más habituales son las de papel cuché, que pueden presentar un acabado en mate o en brillo, y las de poliéster, más resistentes y duraderas.
